El sexo anal es la práctica en la cual el pene se introduce por el ano de una persona, ya sea mujer u hombre. Aunque resulta muy placentero tanto para el activo como para el pasivo, requiere de utilizar lubricantes y llevar adelante ciertos cuidados con el fin de evitar dolores y complicaciones.
A continuación, te mostramos todo lo que debes conocer sobre esta práctica sexual; posiciones, juguetes, recomendaciones y ¡mucho más!
El sexo anal no debe llevarse a cabo de manera tan frecuente. Cuando esta zona es penetrada se exhibe al máximo que es más delicada. De hecho, y a diferencia de lo que ocurre con la vagina, el ano no se autolubrica, lo que permite que el condón se rompa con mayor facilidad.
Así, la utilización de un lubricante para el sexo anal resulta imprescindible. Sin embargo, no debe ser vaselina (uno de los más conocidos) y ninguno que contenga aceite o cremas. ¿Cuáles se recomiendan? Los que vienen con base de agua o silicona.
Más allá de los cuidados, en este tipo de sexo es igual y hasta más importante escuchar a tu organismo. Concretamente, si eres pasivo y sientes que te duele, detente de inmediato ya que, en caso contrario, las consecuencias podrían ser perjudiciales.
A su vez, si eres el activo y no utilizas protección cuentas con más probabilidades de contraer VIH y otras enfermedades sexuales. Por esta razón, debes asegurarte también que tu pareja tenga higienizada la zona.
Como te comentamos en esta entrada, la demanda de juguetes sexuales ha crecido notablemente en los últimos dos años. Hay quienes los disfrutan más cuando mantienen sexo por el ano.
A continuación, te mostramos cuáles son los juguetes más empleados en la actualidad para este tipo de sexo:
Claro está que ninguno es mejor que otro, dado que depende principalmente de tus necesidades y preferencias tanto personales como de la pareja.
Recuerdas cuando te hablamos sobre las posiciones sexuales más frecuentadas. Bueno, ahora te mostramos las más recomendables para llevar a cabo una relación con penetración por el ano.
A diferencia de la vaginal, requiere que la persona levante un poco la cola para favorecer la penetración, la cual es muy profunda. Por esto último, lo mejor es que no la implementes si careces de experiencia.
Es similar a la de perrito, pero inclinando las piernas y el cuerpo hacia un costado y dejando la zona libre para penetrar de manera directa y profunda.
Quien va a penetrar se acuesta boca arriba, mientras que la otra persona se sienta encima tanto para posibilitar la penetración por el ano como para controlar la intensidad. A su vez, se dispone de gran libertad para tocarse mutuamente, por lo que resulta muy cómoda y confortable.
El sexo anal es menos empleado que el vaginal en el caso de parejas compuestas por hombres y mujeres. En cambio, para dos hombres es la opción más adecuada. Ten cuenta todo lo que te facilitamos y consúltanos ante cualquier duda o inconveniente.
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